NO ME DIGÁS QUE SOS DEL ROJO

POR SHERPA.

No me digás que sos del rojo. ¿Creés que porque te ponés la camiseta los domingos para la ciclovía o los jueves en la noche para la recochita con los amigos, sos americano?

Qué fácil la has tenido. No te tocó la época en que los jugadores saltaban a la cancha con las medias remendadas. Ni cuando ponían alcancías de cartón para recoger “limosnas” para pagarles el sueldo. Tampoco soportaste las burlas de los hinchas rivales cuando sus nóminas millonarias nos goleaban cada año. No sufriste de un paro cardiaco la noche de aquel 19. Tal vez te enteraste que perdimos tres finales consecutivas de copa libertadores, cada una más terrorífica que la anterior. Pero no te tocó llorar con el gol de Aguirre en el minuto 92. No te tocó lo que vivieron los hinchas viejos. Muchos de ellos ya muertos.

Ser hincha de la Mechita te ha sido fácil. Te tocó el tricampeonato con De la Pava y el campañón con Umaña. Te heredaron el escudo con 9, 10 o hasta 12 estrellas.

Ahora se te han venido las malas. La Mechita ha sido hostigada, perseguida y acosada por la dimayor, RCN, Postobón, los gringos y el poder de Bogotá con la complicidad del gobierno colombiano. Y lo que es peor, por muchos de esos que se ufanan de ser americanos y han escalado hasta ser dirigentes del club. Hoy en día el rojo está en el suelo. Pero tiene que ser muy grande un club para seguir respirando a pesar del tamaño de los ataques sistemáticos y certeros.

Hoy es cuando te toca demostrar si sos americano o un novelero más que se puso la roja porque ganaba.

A mí no me vengás a decir que sos americano. Y mucho menos me vengás con comentarios denigrantes sobre los barristas de sur. Esos a los que vos llamás ladrones y viciosos han demostrado mucho más que vos que son del rojo. Ellos van a todos lados, y como no tienen plata para pagar por lo que se han robado los verdaderos ladrones del club, alientan siempre y acompañan donde sea. Y estoy seguro que aunque no tengan para comer, van a poner plata para ayudar a la Mechita a salir de ésta.

Si señores, ser hincha del rojo no es ni debe ser fácil. La Mechita representa a la gente de abajo. La gente que está predestinada a perder. Por eso es que nunca nos perdonarán que nos hayamos rebelado contra la historia de un torneo creado para que se lo ganaran los mismos de siempre. Hasta 1979, de los más de 30 campeonatos jugados, 22 se los habían repartido los dos equipos de la capital y el de las clases altas de Cali. Esos que podían pagar nóminas de estrellas extranjeras. Pero el rojo cambió eso y se lo ganó todo en Colombia. La pasión del pueblo mestizo, del obrero había puesto las cosas de cabeza. Así de grande es la Mechita que asusta a los dueños del país. Por eso es que tienen que acabarla. Porque nuestra pasión prueba que es posible un país diferente. Nos señalaron de ladrones y nos exiliaron. Pero no nos robamos nada si no que recuperamos lo que debía ser nuestro.

Nadie nos va ayudar. Estamos solos pero somos muchos. Ahora es el momento de la verdad. Tenés que tomar una decisión: ¿vas a dejar que una vez más ganen los mismos de siempre? O ¿vas a pelear por lo que es tuyo?

América es del pueblo americano y si permitimos que nos la roben, que nos la acaben, somos indignos de compartir la camiseta con los muertos de aquel 19, con lo héroes-jugadores que tenían que lavar el uniforme o “la mechita” ellos mismos el día antes de los partidos.

Todos, a lo largo y ancho de Colombia y en España, USA o donde quiera que haya un americano de verdad, tenemos que actuar ya mismo. Apoyemos las campañas que se están haciendo para salvar al rojo. Propongamos más formas de ayudar.

Hacelo por las alegrías que te ha dado el rojo... porque es el único pentacampeón del país, porque fue el segundo mejor club del mundo, porque fue el campeón del siglo XX, porque es el que más estrellas tiene en su escudo, por el tricampeonato, por la estrella con Umaña “sin plata pa´l agua”, porque es el que tiene más gente... pero más que todo hacelo porque es el más grande... porque nuestro pueblo necesita de esta pasión y este carnaval y porque NO NOS PODEMOS DEJAR GANAR DE ELLOS.

Unámonos para apoyar al rojo. En paz pero con firmeza.

Tomalo cómo lo que es: ALGO PERSONAL. Te están atacando a vos, a lo que la Mechita representa. Nos irrespetan y no nos movemos. ¿Hasta cuándo con tu indiferencia? Hacen con vos lo que quieren y no luchás.

Ahora tal vez me vas a poder decir que sos del rojo. Claro que si te queda grande la camiseta de la Mechita, ponete una pequeña, todas vienen en tonos de verde.